Los pueblos de Briet: 1906

El verano de 1906 todavía resuenan en España los ecos del intento de magnicidio de Alfonso XIII el día de su boda con Victoria Eugenia de Battenberg, el 31 de mayo en Madrid. A su regreso del Palacio Real sufrieron un atentado mediante una bomba escondida en un ramo de flores, que fue lanzada a su carroza por el anarquista Mateo Morral cuando pasaban por la calle Mayor de Madrid. Los reyes resultaron ilesos, pero murieron 3 oficiales y 5 soldados de su séquito real, así como 3 personas desde sus balcones. Unas 14 personas que contemplaban el paso del cortejo resultaron heridas.


Ese mismo verano Lucien Briet retrasa su viaje al Alto Aragón, instalándose en el Parador de Boltaña a finales del mes de septiembre. Tras su infructuoso intento de 1905, este año por fin consigue llegar hasta el río Vero y la Sierra de Guara. El 2 de octubre inicia su ruta hacia el sur acompañado de su guía Lorenzo Viu. Pasa la primera noche en Morcat, pueblo de 5 casas y 35 vecinos (datos de 1900), que por entonces pertenecía al ayuntamiento de Sieste junto a Latorrecilla (99), Puimorcat (83), Sieste (57), La Valle (40), Margudgued (39), Barranco Fondo, Luparuelo, San Martín y San Belián. En palabras del párroco del pueblo, don Francisco Asín, "Morcat era como un tren, cuyas casas contruidas una junto a otra parecían cinco vagones arrastrados por la iglesia, que hacía las veces de locomotora y en la que el campanario simulaba una pequeña y rechoncha chimenea".

Morcat, fotografía de Lucien Briet (1906)



Límites del municipio de Sieste hacia 1930

Al día siguiente continúa su ruta hacia Sarsa de Surta, pasando por Puimorcat, también conocido como Pueyo de Morcat, aldea perteneciente al mismo municipio de Sieste que por entonces tenía una docena de casas distribuidas en 2 barrios y con 83 vecinos. 

Puimorcat, fotografía de Lucien Briet (1906)

Camino de Sarsa de Surta percibe la proximidad de una población más importante, ya que en su trayecto se encuentra con la presencia y el vocerío de los campesinos trabajando en el campo. Sarsa era por entonces un pueblo de 26 casas y 163 habitantes (datos de 1900), cabecera de un municipio también formado por Las Bellostas (101), Paúles de Vero (80), Bagüeste (79), Coscollar y Gallinero Bajo. En Sarsa de Surta permanece dos días, alojándose en la casa del párroco don Medardo Cereza, natural de Suelves. Visita la torre del castillo, hoy desaparecida, y se adentra en las cuevas de Sarsa junto a un guía local, Domingo Colomés.

Sarsa de Surta, fotografía de Lucien Briet (1906)

Límites del municipio de Sarsa de Surta hacia 1930


El día 5 de octubre continúa su ruta hacia Lecina, deteniéndose en las cuevas de Santa María de la Nuez. En Lecina se aloja en la casa de Tomás Lorés, cirujano practicante del pueblo y secretario del Ayuntamiento de Bárcabo. Durante su estancia en Lecina visitó la fuente del río Vero, la garganta de Lecina y el barranco de la Choca. No deja en su relato ninguna mención de la hoy reconocida encina milenaria de Lecina. Del pueblo destaca la iglesia, el cubierto, la cruz de la plaza, y las casas Sampietro y Carruesco. Lecina era por entonces un pueblo de unas 34 casas y 223 habitantes (1900). Era el pueblo más poblado del ayuntamiento de Bárcabo, en el que también se incluían el propio Bárcabo (150), Eripol (100), Suelves (100), Almazorre (81), Betorz (81), Santa María de la Nuez (40), Hospitaled (31), La Coloma y La Potenciana.

Lecina: plaza, cubierto y casa Lorés. Fotografía de Lucien Briet (1906)



Límites del municipio de Bárcabo hacia 1930 (y hoy)


El día 8 de octubre reemprende su ruta hacia Alquézar por el collado de San Caprasio y Asque. En Alquézar se aloja en casa de Don Antonio Buil, que tenía un estanco en la calle de la Plaza. En su casa tiene ocasión de probar una torta típica de la región, llamada "empanadón", que contiene trozos de bacalao y patata. Toma café con leche de cabra, a diferencia de en Lecina y Sarsa, donde se tuvo que contentar con tomar café solo. Alquézar era por entonces una villa de 909 habitantes (1900), cabecera única de su término municipal.

En Alquézar visita el pueblo y la iglesia colegiata acompañado del párroco del pueblo, Don Rafael Ayerbe. Le da tiempo también a visitar la garganta de Villacantal y las Clusas del río Vero, pero tiene que regresar a Francia debido a repentino cambio en el tiempo. La tarde del día 10 bajan las temperaturas y comienza a llover, lluvia que es nieve en los puertos de montaña pirenaicos. Temiendo quedarse bloqueado en Torla, adelanta su regreso hacia Boltaña, no por el Salto de Roldán como tenía planeado, sino por Naval y Samitier. El 19 de octubre cruza el puerto de Boucharo abriéndose camino por la nieve con una pala.

Alquézar, fotografía de Lucien Briet (1906)


Ruta de Lucien Briet entre Lecina y Alquézar (8 de octubre de 1906)

En 1908 volverá a completar el recorrido completo por los Oscuros del río Vero, pero ese es otro capítulo de su historia.

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